Gran parte de los pacientes con implantes dentales en Sevilla se
enfrentan a un problema antes de este tratamiento: la infección en una de sus
muelas. Este proceso causa dolor y puede convertirse en crónico si no se trata
a tiempo.
Si estás sufriendo una infección en una muela es importante
acudir al dentista para que evalúe el estado y determine el tratamiento. Lo
habitual es que se recete un antibiótico, pero ha de ser uno especial
dependiendo del estado y el grado de la infección, por lo que no vale el que
recetaron a un familiar o a nosotros mismos en ocasiones anteriores.
Si hay un dolor intenso el dentista puede recetar un anti inflamatorio especifico y dormir con la cabeza un poco levantada para aliviar la
inflamación.
En ocasiones, esa infección puede acabar con la extracción
de la muela y la necesidad de colocar un implante dental para recuperar la
funcionalidad de esa parte de la dentadura.